Todo comenzó un día en que un amigo me habló de ello. Yo escribía en un foro, escribía cosas que luego quedaban perdidas por el foro, mezcladas con cosas de gente que también escribía. En ese foro me leía mucha gente, que a día de hoy siguen haciéndolo, y aprovecho para darles las gracias. Mi amigo me comentó de qué iba esto de los blog. Comencé con mi primer blog, allá por el año 2002, en www.zonalibre.org , o incluso antes, tengo mala memoria para las fechas. Mi blog se llamaba Da igual y tras sufrir un cambio importante en mi vida, supe que debía de cerrar ese blog y mudarme a otro. Porque todas las cosas que había escritas me parecían demasiado tristes, y demasiado inmaduras. Así que creé otro, que poca gente conoce, muy poca. No pensaba crearme ninguno, necesitaba intimidad, y escribiendo no la tenía, porque terminaba contando lo que pensaba, lo que sentía e incluso lo que me ocurría. De hecho terminé creándome ese blog. Di la dirección a muy poca gente conocida, porque mucha gente me envió mails pidiéndome que regresara al blog, o que al menos si me creaba otro que se lo hiciera saber porque querían seguir leyendo cosas mías. Gracias a ese blog (el 2º) conocí a unas cuantas personas excepcionales, que a día de hoy creo que me siguen visitando, al menos, de vez en cuando. Fue entonces, cuando decidí que tenía que crearme un blog, en otro sitio, porque el anterior solo había sido un espacio de privacidad y "soledad", y me apetecía volver a ser "eigual" volver a escribir un blog personal, pero más maduro y mejor. Volver a escribir, pero como eigual: renovada y con más fuerzas. Y aquí sigo. Podría haber dejado el tema de los blog desde que cerré el primero, pero no lo hice. Yo necesito mi blog. Necesito escribir aquí, como necesito también escribir en privado sólo para mi, o ese "libro" en el que estoy trabajando y espero podáis muy pronto, la gente a la que le guste mi particular forma de escribir, leerlo.
Hay gente que me dice que casi siempre hablo de amor. Sí, es cierto, suelo tratar mucho ese tema. Porque aunque no caigamos en la cuenta, estamos rodeados, todo el día, de amor. En casa, en el trabajo, con nuestra pareja, con nuestros familiares. Distintas formas de amar, pero amor, al fin y al cabo. Por eso casi siempre hablo de ello. Porque me gusta. Porque tengo mucho amor encerrado, y porque tengo la necesidad de hacerlo, de hablar de ello. Otras personas me han preguntado que de donde saco todas esas ideas a la hora de escribir: sinceramente no lo sé, no sé contestar a eso. Yo, desde que me despierto por la mañana, voy viviendo el día despacio, empapándome de todo lo que ocurre a mi alrededor, de las historias de la gente, sintiendo cada pequeña cosa, cada detalle, y luego no sé que ocurre: necesito escribirlo. Y lo hago. Mejor o peor. Con más faltas de ortografía o con menos.
Estoy contenta. Contenta con mi vida en general. Con lo que estoy haciendo. Incluso estoy contenta con esto de cumplir años, que por cierto, ya toca la semana que viene. Y estáis todos invitados a una ración de palabras, ese día, aquí, en mi blog. Que invita la casa.
Soplaré las velas, claro que sí. Y apuntaré este año en el calendario como único. Los 27 serán una edad maravillosa, para hacer cualquier plan, para cumplir nuevos sueños. Para crecer. Para seguir creciendo y escribiendo. Para todo. Es una buena edad. Me gusta cumplir años. Y esto, con 25 años no lo decía. Pero hace poco me di cuenta de que cumplir años es maravilloso y una gran señal de que sigues vivo. De que ha merecido la pena haber sufrido tanto, años atrás. Y que nunca es tarde para ser feliz si sigue existiendo esperanza y vida.
Hay gente que me dice que casi siempre hablo de amor. Sí, es cierto, suelo tratar mucho ese tema. Porque aunque no caigamos en la cuenta, estamos rodeados, todo el día, de amor. En casa, en el trabajo, con nuestra pareja, con nuestros familiares. Distintas formas de amar, pero amor, al fin y al cabo. Por eso casi siempre hablo de ello. Porque me gusta. Porque tengo mucho amor encerrado, y porque tengo la necesidad de hacerlo, de hablar de ello. Otras personas me han preguntado que de donde saco todas esas ideas a la hora de escribir: sinceramente no lo sé, no sé contestar a eso. Yo, desde que me despierto por la mañana, voy viviendo el día despacio, empapándome de todo lo que ocurre a mi alrededor, de las historias de la gente, sintiendo cada pequeña cosa, cada detalle, y luego no sé que ocurre: necesito escribirlo. Y lo hago. Mejor o peor. Con más faltas de ortografía o con menos.
Estoy contenta. Contenta con mi vida en general. Con lo que estoy haciendo. Incluso estoy contenta con esto de cumplir años, que por cierto, ya toca la semana que viene. Y estáis todos invitados a una ración de palabras, ese día, aquí, en mi blog. Que invita la casa.
Soplaré las velas, claro que sí. Y apuntaré este año en el calendario como único. Los 27 serán una edad maravillosa, para hacer cualquier plan, para cumplir nuevos sueños. Para crecer. Para seguir creciendo y escribiendo. Para todo. Es una buena edad. Me gusta cumplir años. Y esto, con 25 años no lo decía. Pero hace poco me di cuenta de que cumplir años es maravilloso y una gran señal de que sigues vivo. De que ha merecido la pena haber sufrido tanto, años atrás. Y que nunca es tarde para ser feliz si sigue existiendo esperanza y vida.
5 comentarios:
muchas gracias por tu comentario. Ahora mismo el libro está retirado temporalmente del mercado virtual porque algunos consumidores han detectado unos fallos de imprenta y me han dado parte, pero lo tendrás disponible muy pronto, en un par de semanas. Mientras tanto iré colgando algo para matar el hambre...
un saludo.
Jo.. me hubiera gustado leer tus otros blogs, lástima... te conozco gracias a Comunidad Ezcultura, y te leo desde hare relativamente poco... y me encanta, a ver si pasa el verano, y ants de que empiece la facul tengo tiempo de leerte otras entradas más antiguas...
Te entiendo muy bien, yo tb necesito el blog... y los que no son bloggers, no nos entienden...
Bueno, besos guapa, sigo leyéndote... La semana que viene no podré felicitarte porque estaré en el campo (al menos la mayoría de la semana), por tanto, si me permites: FELICIDADES!
Gracias dulce pena!
Un abrazo.
Yo te leí por primera vez en zonalibre (también tenía un blog ahí). Y me hizo ilusión llegar a este a través de algunos de tus comentarios al eZcritor ;)
Que sepas que hay gente anónima que se alegra de seguirte la pista :)
juajo: que casualidades no? el que nos volvamos a encontrar. Me he alegrado mucho al leerte. Gracias!. A ver si encuentro en tu blog, tu email y te escribo, pues me gustaría preguntarte algo.
Un abrazo.
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