Si todo marcha como yo pienso que va a marchar, en una semana, seré : pluriempleada.
Sí, vaya, que tendré dos trabajos: que incluso tendré que empalmar de uno a otro.
Hoy una compañera me decía:
Sí, se me han saltado las lágrimas. Quisiera llevarme a toda esta gente con la que cada día trabajo, conmigo. Llevarlos a otro trabajo. Quisiera estos compañeros para siempre. Me han dado tanto, en tan poco tiempo: tantas risas, tanta complicidad, tanto cariño, que no se como devolverles todo eso. No se si me dará tiempo.
Bueno, el caso es, que esta mañana a las 8 me encontraba en un autobús, medio perdida en un lugar donde solo se veían camiones, rotondas y edificios grandes.
No he tenido otra opción que preguntarle a una mujer mayor que dónde me tenía que bajar, en qué parada, para llegar a la calle "tal" y la mujer, (amable mujer, por cierto) me ha dicho que en la misma parada que ella. Así pues, solo me ha quedado, esperar a que la mujer se levantase de su asiento y seguirla: y así ha sido. Se ha levantado. Hemos bajado del autobús. Hemos cruzado la carretera juntas, ella me iba avisando de que los semáforos estaban en rojo. Yo la miraba. Ella me iba indicando "ahora bajas esa calle, y giras, y allí está la calle que buscas".
Decir que la mujer me ha indicando muy bien, pero que yo he echado a andar en dirección contrario al lugar de la entrevista. Total, que me he visto 100 números más arriba, y luego, vuelta atrás: retroceso, me rebobino....
He encontrado el lugar (por fin), también gracias a un hombre al que he sorprendido tirando la basura, y me ha indicado a la perfección como llegar.Llegaba 10 minutos tarde, claro, por haber andado en dirección contraria, pero no ha importado, porque al llegar, me han atendido 15 minutos tarde: total, que no he llegado tarde, eso si, he llegado ¡con un calor!, de tanto acelerar el paso.
Allí, en la recepción, las chicas hablaban de despedidas: todas compañeras de trabajo. Una decía que se iba, que había encontrado un trabajo mejor, y que se marchaba este mismo Lunes, otra le daba un regalo a una de ellas de su viaje a Italia. La otra se quejaba de que le habían robado el bolso, y luego, todas, han llorado, juntas, por lo del bolso, por que una de ellas deja el trabajo, y porque otra también ha dicho que pretende cambiar de trabajo, y aunque luego ha dicho que era una especie de broma, han llorado todas juntas.
Y mientras yo, allí ¬_¬U esperando a que la chica que me tenía que hacer la entrevista llegase. Y ha llegado, a aparecido en un ascensor y me ha llamado, y yo he ido hasta ese ascensor, y a partir de ahí he sabido que me van a coger para ese trabajo. Lo que ocurre es, que no quiero hacerme demasiadas ilusiones, por si esta vez mi olfato falla y quedo fatal delante de mi niña y delante de todos ustedes.
Me imagino de pluriempleada y me encanto. Podré pagar todas mis deudas sin problemas. Podré, esta Navidad hacerle un buen regalo a mi niña: que bien se lo merece. Comprar algo de ropa (también con mi niña, que tiene muy buen gusto). Invitarla a cenar para celebrar mis trabajos (los que espero tener) y celebrar todo el tiempo que llevamos juntas, que no es poco,como Dios manda, que son ya 3 meses, y hoy cuando me lo ha dicho, con ese jersey que lleva puesto,( que me encanta ), esa sonrisa, esa mirada: me ha entrado un cosquilleo en el estómago que me ha recordado lo mucho que la quiero y lo afortunada que soy de tenerla a mi lado.
Sí, vaya, que tendré dos trabajos: que incluso tendré que empalmar de uno a otro.
Hoy una compañera me decía:
"Eres una tía valiente, te has venido a Barcelona, sin nada, y estás sobreviviendo y luchando como jamás he visto a nadie hacerlo, y además, echando de menos a tu familia, como les echas...Te admiro, de verdad, nunca te lo digo, pero por si pronto cambias de trabajo, y te vas, quería dejarlo dicho".
Sí, se me han saltado las lágrimas. Quisiera llevarme a toda esta gente con la que cada día trabajo, conmigo. Llevarlos a otro trabajo. Quisiera estos compañeros para siempre. Me han dado tanto, en tan poco tiempo: tantas risas, tanta complicidad, tanto cariño, que no se como devolverles todo eso. No se si me dará tiempo.
Bueno, el caso es, que esta mañana a las 8 me encontraba en un autobús, medio perdida en un lugar donde solo se veían camiones, rotondas y edificios grandes.
No he tenido otra opción que preguntarle a una mujer mayor que dónde me tenía que bajar, en qué parada, para llegar a la calle "tal" y la mujer, (amable mujer, por cierto) me ha dicho que en la misma parada que ella. Así pues, solo me ha quedado, esperar a que la mujer se levantase de su asiento y seguirla: y así ha sido. Se ha levantado. Hemos bajado del autobús. Hemos cruzado la carretera juntas, ella me iba avisando de que los semáforos estaban en rojo. Yo la miraba. Ella me iba indicando "ahora bajas esa calle, y giras, y allí está la calle que buscas".
Decir que la mujer me ha indicando muy bien, pero que yo he echado a andar en dirección contrario al lugar de la entrevista. Total, que me he visto 100 números más arriba, y luego, vuelta atrás: retroceso, me rebobino....
He encontrado el lugar (por fin), también gracias a un hombre al que he sorprendido tirando la basura, y me ha indicado a la perfección como llegar.Llegaba 10 minutos tarde, claro, por haber andado en dirección contraria, pero no ha importado, porque al llegar, me han atendido 15 minutos tarde: total, que no he llegado tarde, eso si, he llegado ¡con un calor!, de tanto acelerar el paso.
Allí, en la recepción, las chicas hablaban de despedidas: todas compañeras de trabajo. Una decía que se iba, que había encontrado un trabajo mejor, y que se marchaba este mismo Lunes, otra le daba un regalo a una de ellas de su viaje a Italia. La otra se quejaba de que le habían robado el bolso, y luego, todas, han llorado, juntas, por lo del bolso, por que una de ellas deja el trabajo, y porque otra también ha dicho que pretende cambiar de trabajo, y aunque luego ha dicho que era una especie de broma, han llorado todas juntas.
Y mientras yo, allí ¬_¬U esperando a que la chica que me tenía que hacer la entrevista llegase. Y ha llegado, a aparecido en un ascensor y me ha llamado, y yo he ido hasta ese ascensor, y a partir de ahí he sabido que me van a coger para ese trabajo. Lo que ocurre es, que no quiero hacerme demasiadas ilusiones, por si esta vez mi olfato falla y quedo fatal delante de mi niña y delante de todos ustedes.
Me imagino de pluriempleada y me encanto. Podré pagar todas mis deudas sin problemas. Podré, esta Navidad hacerle un buen regalo a mi niña: que bien se lo merece. Comprar algo de ropa (también con mi niña, que tiene muy buen gusto). Invitarla a cenar para celebrar mis trabajos (los que espero tener) y celebrar todo el tiempo que llevamos juntas, que no es poco,como Dios manda, que son ya 3 meses, y hoy cuando me lo ha dicho, con ese jersey que lleva puesto,( que me encanta ), esa sonrisa, esa mirada: me ha entrado un cosquilleo en el estómago que me ha recordado lo mucho que la quiero y lo afortunada que soy de tenerla a mi lado.
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