La gente cuando se enamora se vuelve loca.
La gente dice: "he conocido el amor de mi vida", pero.. ¿cómo saben que es el amor de su vida? ¿es que las personas venimos con una etiqueta que pone: EL AMOR DE TU VIDA [y tu nombre].
Las personas se enamoran locamente, y hacen las cosas locamente.
Primero vendrán horas interminables colgados de un teléfono, facturas de de 200 euros, dolor de oreja y muñeca: nervios: ¡no me llama!. Luego: citas, planes, ¿en tu casa o en la mía?.
La primera cita: ¿le gustará mi cuerpo? ¿mi forma de acariciar? ¿me gustará a mi? ¿nos compenetraremos en la cama?. Son preguntas que desde que hayas la respuesta nos comenzamos a preguntar el porqué de hacerse aquellas preguntas.
Y bien. Ya tienes pareja. Ahora tus amigos te dicen eso de: ¡desde que tienes pareja ya ni te acuerdas de nosotros! y tu familia: ¡ya sólo te vemos el pelo en días señalados y porque te llamamos nosotros! y en tu trabajo: tu jefe te pillará más de una vez con la cabeza en otra parte... y te llamará la atención.
Cumple meses: tu pareja cada mes te hace un regalo, para celebrar vuestro amor [y yo me pregunto, ¿si cada mes os hacéis un regalo, ¿que no os entregaréis cuando hagáis un año más cada año]. Y tu no sabes que regalarle, y das vueltas y vueltas entre libros, cd's ropa, y terminas comprando eso que ya tiene, o preguntándole ¿qué quieres que te regale, cariño?.
Miras a la gente, les ves infelices a tu lado y tu te ves feliz, porque piensas que llevas un tesoro de la mano.
Pronto llega ese momento en que las despedidas cuestan. Cada vez duele más separare por las noches. Y cada vez el tiempo que pasáis juntos se hace más corto. Dormir los fines de semana se convierte en un royo. Parecéis adolescentes viéndose a escondidas.
Por eso un día se lo propones: ¡vente a vivir conmigo!. Y quizá esto sea lo más arriesgado de todo, pero claro, quien no arriesga: no gana. Y esta vida se basa en eso: RIESGO. Hay que arriesgar. Por eso terminan por irse a vivir juntos. Y cada día es mejor que el anterior. Y cada día más especial, mas maravilloso.
El primer día que ella/el deja su cepillo de dientes al lado del tuyo, se te saltan las lágrimas de alegría. Y cuando va llenando la casa con sus cosas todo te parece mucho más serio.
Ahora haces comida para dos, fallas en las medidas. Le preguntas a cada momento: ¿te gusta...esto, lo otro...lo demás allá?. Y tu sorpresa crecerá cuando cada vez te conteste, acompañándolo con un beso.
Desde que ella/el está en casa comes más sano. Ya no pides tantas pizzas, ni cocinas tantas hamburguesas, ahora le cuidas y te cuidas, porque quieres dar ejemplo, aunque ese ejemplo fracase algunos días, cuando para desayunar le prepares tortitas con chocolate y el chocolate termine en otras partes del cuerpo, además de en la boca.
Los amigos os llamarán : os tendrán cierta envidia. Y más, cuando llevéis un año, dos, tres, cuatro, juntos y cada día se os vea igual, o más enamorados si cabe.
Los "sin pareja" os pedirán que por favor le busquéis novio/a. Los que ya están emparejados, os propondrán cenas y reuniones.
Sí, lo mejor es vivir un tiempo juntos antes de casarse. Lo mejor es, convivir y con el tiempo y la convivencia ir elaborando un plan: ¿quién lo pedirá antes?. Eso nunca se sabe. Puede ser uno, u otro. O los dos a la vez. Nunca se sabe.
Y aunque casarse no es imprescindible, siempre es bonito. Es bonito casarse, atar esa unión un poco más, atarla además de con amor, con papeles. Es bonito casarse, y mejor aún si es algo un poco intimo: familia y mejores amigos. Y esas cosa típicas que se suelen hacer y que todos, en algún momento de nuestra vida nos preguntamos y planteamos: ¿dónde iremos de viaje de novios?.
Mirar de reojo la mano de tu pareja, y ver ese anillo en su dedo, el mismo que llevas tu. Cogerle la mano y saberla tu mujer.
Saber que tienes compañero de viaje hasta que ambos queráis.
Y si por alguna razón, un día, el amor se termina, lo mejor y más bonito de toda esta historia es saber separarse también con amor. Porque el amor igual que es eterno no lo es.
Por eso, mientras el amor está vivo, hay que disfrutarlo lo más que puedas.
Porque el amor igual que empieza se termina.
Hay que cuidar, por eso, lo que tenemos. Y cuando pensemos en cualquier locura, acordaros de aquel día, en el que tanto te costó cogerle la mano por primera vez, o en todo aquel camino que juntos recorristeis para llegar hasta este punto, que no es la meta. En una relación nunca hay una meta, solo hay un FUTURO, por construir, la meta no existe, porque en una relación siempre hay cosas nuevas que entregar. Siempre existe un nuevo beso por dar.
Abre tu corazón, enamorate, y si ya lo estás piensa en lo afortunado/a que eres: no todo el mundo puede dormir esta noche al lado de alguien como tu, o como ella/el, rodeados de tanto amor.
Y todo cambia
te contó
eigual
2 comentarios:
De verdad que lo primero que te preguntas en la primera cita es si os compenetrareis en la cama??? O_o
+o-: El texto solamente pensamientos inventados e imaginados.
No, no me pregunto eso en la primera cita.
Pero si es la 3º cosa que me importa.
Un saludo
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