Cuando te salva un libro

Sé que soy despistada. Sé que cuando camino por la calle, con el mp3 en las orejas, un libro en la mano izquierda, y la otra en el bolsillo.....voy algo despistada. En mi mundo. Escribiendo mentalmente cualquier escena, que adapto para el siguiente capitulo. Porque a veces, con las pequeñas ideas se construyen las grandes.
Y nada, yo iba caminando, no había hecho más que salir del trabajo, cruzar el primer paso de peatones, de cada día, y luego el segundo, ése que no he cruzado, porque a eso no se le puede llamar cruzar. El semáforo estaba en verde, y he comenzado a andar sobre el paso de cebra, pero mi atención se ha centrado en la mujer de la Farmacia. Esa que siempre veo, y nunca sé exactamente que piensa a las 9 de la mañana, con la mirada tan pérdida y la cara tan triste. Un hombre le entregaba algo (aún no sé que es, y mira que tengo ese objeto en la mente). Le entregaba algo, y ella le sonreía mientras sostenía esa cosa en la mano. Y ha sido en ese momento, cuando he tropezado, justo al terminar de cruzar el paso de peatones, he tropezado con no sé que, aún, y he caído todo lo larga que soy (casi un metro setenta). He quedado tumbada boca abajo en la acera, mirando a la chica de la cara triste, con aquella cosa en la mano. Me he levantado lo más rápido que he podido. La chica se ha acercado a mi, me ha querido ofrecer ayuda, pero le he dicho que estaba muy bien, y le he dado las gracias. "Te ha salvado el libro ¿eh? - me dice -". Yo le sonrío. Sí. Sí.

Y huyo. Porque a lo que he hecho no se lo puede llamar de otra manera. He huido de la escena. Recordando que la chica quería curarme la rodilla y el codo, que me la he rozado. Y sí, tenía razón, de no llevar el libro en la mano izquierda, me habría raspado la cara, la mano y el brazo entero. Pero he ido a caer con la cara sobre el libro, y el mismo brazo, ha caído también sobre éste, con lo cual, la peor parte se la ha llevado el libro, el cual está totalmente raspado por debajo (una pena, pues era nuevo). No he sido consciente del dolor y las raspaduras que me ha ahorrado el libro, hasta que he asimilado mi caída, que ha sido cuando me he visto los pantalones blancos de suciedad y rotos. Entonces la escena ha venido a mi cabeza: yo en el suelo, del que he tardado en levantarme, menos que en caerme. Luego la chica de la farmacia que quería hacerme la cura, y le he dicho que estaba perfectamente: ¡y un cuerno! estaba echa pedazos, pero no quería descubrir que era eso que le ha entregaba el hombre, y que tanto ha captado mi atención, y me ha hecho no mirar al suelo, y tropezar. No quería tan poco, estar cerca de ella, no quería descubrir a que se debe su cara triste a las 9 de la mañana. Me gusta imaginar.

Cuando he llegado a casa me han hecho las pertinentes curas. Mi codo ha quedado así:



Si, en la foto no se aprecia del todo, la enorme raspadura que me he hecho. Pero he decidido enseñar el codo, ya que ver mi rodilla resulta desagradable pues la tengo en carne viva ahora mismo. Así que mejor el codo.

Y aquí, el libro que me ha salvado la vida...............que estos días pensaba que menudo tocho de libro para llevar cada día al trabajo. Pesa un huevo. Pensaba: mira que no haber empezado a leerme el otro, que era más finito, pues no, tenía que ser este. Porque me tenía que salvar del golpe. Y es que, es verdad, los libros, a veces, también nos salvan la vida.


2 comentarios:

Anónimo 27 de agosto de 2008, 22:14  

No sé muy bien si reirme con este post (no lo puedo evitar, me sale una sonrisita) o preocuparme (tampoco lo puedo evitar. Esa rodilla tiene doler un montón).

No sé no sé ... ;) Vaya un caso jejeje a ver cómo era... ah si, "cura sana, culito de rana, si no sana hoy sanará mañana" :)

besotes

Josemy 28 de agosto de 2008, 12:14  

Uff.. pobre, espero que ya estés mejor de las heridas...

Has tenido suerte de llevar el libro.. la verdad, pero, respecto a la chica de cara triste... ¿Nunca te has preguntado si lo que imaginas es la realidad? Tal vez hubiera estado bien conocerla....

Besos

eigual

Empecé a escribir este blog en una época bastante importante de mi vida. Aquí he escrito poemas y relatos. De la única forma que se. Hace poco me mude a www.escriboaqui.es con las mimas ganas de escribir que nunca. Con nuevos proyectos y sueños. Disfruta de todas las palabras que se quedaron aquí.